Por Danilo Núñez Izquierdo

Director ejecutivo Fundación INFOCAP

Vía Cooperativa

Comenzado un nuevo año, las distintas personas que formamos parte de las organizaciones de la sociedad civil iniciamos el proceso de proyectar y diseñar las estrategias para los problemas que nos parecen más urgentes de abordar como país. En un contexto económico complejo, y aún sintiendo las consecuencias que dejó el ciclo de pandemia, el panorama particular del trabajo y el empleo nos presenta, a quienes intervenimos directamente en él, un escenario marcado por los temas de informalidad, desempleo e integración de la mujer.

Asociado a estos tres grandes temas, aparece un fenómeno relativamente reciente, transversal de cada uno de estos problemas, la migración en nuestro país, el que ya no puede ser ignorado.

Actualmente, más de un millón de personas migrantes vive en la Región Metropolitana, aproximadamente un promedio de 10.000 habitantes por comunas. Si bien muchas de estas personas cuentan con una preparación académica, contando con estudios superiores completos -60% de ellos tienen 12 años de escolaridad o menos-, lo que en la práctica se traduce en mayores riesgos de caer en situaciones de precariedad laboral, informalidad y desempleo.

Ante un fenómeno nuevo y de carácter global como éste, el país se encuentra en un proceso de transición, que implica una adecuación de los programas sociales, tanto de las instituciones públicas como las acciones de intervención de las organizaciones de la sociedad civil. Así también, a nivel social, esto ha exigido en un corto periodo de tiempo, convivir con una mayor diversidad cultural, que requiere de toda nuestra atención, cuidado en su gestión y conducción.

Desde Infocap detectamos que en estos últimos 5 años han sido pocos los programas sociales que actúan de manera suficiente en cobertura y profundidad en los grupos de personas migrantes, quienes a su vez se han encontrado con una institucionalidad cerrada, incapaz de encausar su llegada de una manera prolija. En este escenario, consideramos que una entrada guiada al sistema laboral chileno es uno de los puntos esenciales para avanzar con decisión a una convivencia integrada y satisfactoria para todas y todos los implicados.

Abrir espacios de orientación laboral, formación y trabajo para personas migrantes y chilenas permite encontrarse en el hacer, en aquello que orienta nuestro desarrollo y cotidianeidad, aquello que nos otorga dignidad y un rol social claro. Las oportunidades laborales son importantes porque implican reconocimiento, porque nos ayudan a ver con mayor certidumbre el futuro y nos otorgan un espacio claro en los lugares que habitamos. Trabajar y formarnos juntos promueve el conocimiento mutuo, el respeto e incluso las relaciones fraternas. Para Infocap 2023 debe ser un año de toma de posición en este aspecto, abriendo con más determinación oportunidades para facilitar esta convivencia y aportar a la construcción de un país más justo.